La imagen de los fiscales

Fuente: El Comercio.

El fiscal supremo Pablo Sánchez consideró hoy que debe haber "un giro total" o "un cambio de timón" en la dirección del Ministerio Público, si es que se desea mejorar la imagen y superar la crisis de esa institución, afectada por la delicada situación en Áncash.

“El tema de Áncash nos ha puesto de manifiesto que hay una seria crisis en el país, que no solo se ha detectado en Áncash y Chimbote.Creo que, bajo la dirección o desde el punto de vista de la dirección de la Fiscalía de la Nación, tiene que haber un giro total, un cambio de timón, girar todo a la derecha, hacer las cosas mejor. Eso redundará en la imagen de la Fiscalía y superará la crisis que se vive en este momento”, dijo.

En diálogo con Radio San Borja, lamentó que los asistentes a la audiencia pública de la Comisión de Fiscalización hayan pifiado a José Peláez Bardales, el fiscal de la Nación, “porque representa a todo el Ministerio Público”.

Sánchez, uno de los candidatos a suceder a Peláez en la Fiscalía de la Nación, e indicó que existe la necesidad de tener mayor presencia institucional y dar un mayor respaldo a los fiscales para que hagan bien su trabajo.

“La gente en Chimbote y Áncash pide justicia y, obviamente, hay que trabajar en ese sentido. No buscando a los culpables, sino la aplicación de la ley a través de las pruebas que deben existir. Hay que actuar ya mismo, creo que las medidas que se han adoptado son buenas, pero hay que hacerlas ahora mismo”, precisó.

ELECCIONES EN FISCALÍA
En otro momento, Sánchez señaló que no tiene ninguna filiación política y que si lo eligen titular del Ministerio Público, investigará y actuará con suma imparcialidad.

“Como es sabido no tengo ninguna filiación política, ningún acercamiento a políticos. Quizás por eso [no me quieran elegir]. La Fiscalía es como la casa del jabonero: muchos casos caen en la Fiscalía. En una gestión mía se investigará y se actuará con suma imparcialidad”, aseveró.

El fiscal dijo estar decepcionado de la forma en que se sigue la elección del fiscal de la Nación, pues hoy se entiende que hay que conseguir votos, a diferencia de lo que se hacía anteriormente en que había predictibilidad y se elegía en la línea de antigüedad.